martes, 30 de diciembre de 2014

Reforma Laboral: más poder para los/as trabajadores/as



¡Por fin se viene la Reforma Laboral! Entre festejos, críticas, miedos, disputas y esperanzas, llega al Congreso la Reforma Laboral. Digo por fin, porque a 35 largos años de la instalación del Plan Laboral de José Piñera, hoy recién se abre un camino para cambiar las relaciones laborales impuestas.

En este momento me parece bueno recordar algunos aspectos de la historia de nuestra institucionalidad laboral, para situar esta reforma en su contexto[1]. El primer Código Laboral chileno, de 1931, consagra una serie de derechos que habían conquistado los trabajadores, destacándose el descanso dominical, salario mínimo, prohibición de pago con ficha, sala cuna, sindicatos y huelgas, entre otros. Desde entonces hubo un proceso de continuidad de las conquistas sindicales, adquiriendo cada vez los/as trabajadores/as condiciones más dignas de trabajo y de mayor equilibrio en la negociación colectiva hasta 1973.

Sin embargo, este proceso fue truncado con la dictadura: se deroga el Código del Trabajo, se proscriben los sindicatos al igual que los partidos políticos y se levanta el Plan Laboral a partir de 1979. Esto significa un quiebre rotundo en la institucionalidad laboral, una “revolución laboral” en palabras de su ideólogo, que culmina con el Código del Trabajo de 1987. El Plan Laboral busca, en primer lugar, que las relaciones laborales sustenten, y no obstaculicen, el modelo económico neoliberal impuesto en aquellos años. Se instituyó la subordinación del trabajo al capital, buscando garantizar la mayor tasa de ganancia sin interferencias por el “poder monopólico” de la negociación colectiva y los sindicatos. Enarbola las banderas de la libertad, entendiéndola como la expresión de la libertad individual y la restricción completa del derecho colectivo. Esto se expresa en múltiples aspectos de nuestra legislación, como las enormes limitaciones a los sindicatos, a la huelga y la negociación colectiva.

La vuelta a la democracia tuvo procesos de normalización de las relaciones laborales, sin embargo, más o menos atenuados en nuestra legislación, la gran mayoría de los postulados del Plan Laboral se mantienen vigentes.

El día de ayer se anunció una Reforma Laboral que rompe la lógica del Plan Laboral, atreviéndose a abrir paso a un nuevo modelo de relaciones laborales. La mayoría de los puntos de la reforma[2] se enmarcan en lo que puede denominarse la restitución de derechos colectivos. Se resuelven elementos pendientes desde la imposición del Plan Laboral y se avanza en “equiparar la cancha” para las relaciones laborales. Volver a tener derecho efectivo a huelga, contar con  el piso de la negociación anterior para la nueva negociación colectiva y ampliar su cobertura, son aspectos fundamentales para fortalecer la organización, equilibrar la relación con el empresariado y reducir la desigualdad en nuestro país.

¿Podemos estar conformes? No. La situación laboral en nuestro país sigue siendo precaria; la negociación sigue estando limitada a nivel de empresa o inter-empresa y no por ramas; quedan enclaves de la dictadura en la Constitución, que consagra el derecho a libertad de empresa y propiedad privada en mayor rango que el derecho al trabajo, a la sindicalización colectiva y la huelga, lo que limita su pleno ejercicio. Aún queda mucho camino por recorrer para generar un nuevo marco de relaciones laborales, que debe ser fruto de una discusión democrática, normada por una Constitución legítima, que es justamente la discusión a la cual deberemos abocarnos prontamente. Sin embargo, estamos felices, porque esa discusión y las que vengan, las daremos en mejores condiciones. Los que se oponen, por impacientes o retardatarios, deben saber que contaremos con actores fortalecidos para la negociación colectiva y para la lucha, para conquistar relaciones laborales para un país de justicia y dignidad. Estamos felices porque esta reforma significa más poder para los trabajadores y las trabajadoras.





[1] Un análisis más detallado en mi tesis “Desafíos de la reforma laboral chilena” http://www.tesis.uchile.cl/handle/2250/116875 publicada en septiembre
[2] “Conoce los 10 puntos de la reforma laboral impulsada por el Ejecutivo” http://www.latercera.com/noticia/politica/2014/12/674-610643-9-conoce-los-10-puntos-de-la-reforma-laboral-impulsada-por-el-ejecutivo.shtml

jueves, 12 de junio de 2014

Cuenta Pública Senadoras de Avancemos periodo 2012-2014



    Hace dos años con la convicción y motivadas por  avanzar en la democratización de la Universidad de Chile y construir una universidad realmente pública, asumimos el desafío de participar en el Senado Universitario, espacio único en la Educación Superior ganado tras las luchas de nuestra comunidad universitaria a fines de los años 90.

Finalizando nuestro periodo podemos decir que a pesar de dificultades que ha tenido, el Senado Universitario es un espacio de construcción importante para la universidad y sus estudiantes, donde hemos logrado avances concretos en este periodo existiendo desafíos pendientes en un organismo con cada vez más protagonismo e influencia.

Hemos participado activamente en las plenarias como en comisiones  y otros espacios en relación al senado, dentro de esto Irací Hassler como secretaria de la comisión de presupuesto, miembro de la comisión de estatutos y representante del Senado en la Comisión Mixta del presupuesto, y Scarlett Mac-Ginty como secretaria de la comisión de docencia y miembro de la oficina de equidad de género. Hemos sido el vínculo del Senado con la Coordinadora por la Recuperación del Jota, que ha ejercido influencia importante al interior del Senado. Realizamos cuentas públicas presenciales y en un video después de un año de trabajo y lanzamos un boletín informativo.

En relación a los avances del periodo como logro mancomunado del Senado Universitario nos es importante destacar:

  • Por primera vez hubo cambios en la distribución histórica entre facultades e institutos, logrando incorporar nuevos criterios de equidad en la distribución del presupuesto adicional que ha tenido la universidad.
  • Declaramos que la Chile debiera avanzar hacia la gratuidad en la educación, y para eso propusimos el congelamiento de los aranceles. Estuvimos presentes en las marchas por la educación y detuvimos nuestras actividades para acompañar a los trabajadores el 11 de julio del año pasado; repudiamos también la violencia de Fuerzas Especiales contra los estudiantes y nuestra casa de estudios el mismo año.
  • Avanzamos en un objetivo que nos trazamos como fundamental al disputar este espacio: acercar al senado universitario a la comunidad que aspira representar. En distintos conflictos estuvimos presentes, como en las movilizaciones de INAP y Artes. El proyecto de edificio para INAP fue aprobado, faltando fiscalizar su implementación. Modificamos el Reglamento General de Estudiantes reconociendo a los estudiantes del ciclo básico de artes como estudiantes regulares, para tener acceso a los beneficios de todos.
  • Rechazamos el leaseback del Hospital J.J. Aguirre, que significaba la venta del hospital con el arriendo por parte de la Universidad, en una plenaria con una gran presencia de la Coordinadora del Jota y de toda la comunidad.
  • Aprobamos múltiples reglamentos, como el de bienes de especial interés institucional, para que no puedan venderse cosas importantes para la Chile sin que eso pase por una discusión; reglamento de campus para avanzar hacia una administración más amplia de la universidad, con los tres estamentos y uniendo el trabajo de las facultades e institutos.
  • También hemos avanzado en la discusión de la equidad e inclusión en la Universidad de Chile, en que Scarlett como secretaria de la comisión de docencia ha jugado un rol principal. Realizamos un seminario de toda la comunidad que dará como fruto final un libro con los aportes recogidos de la jornada, además la comisión de docencia está terminando de formular una política de equidad e inclusión para la Universidad de Chile.
  • El tema de género ha estado cada vez más presente en el Senado, logrando incluir esta perspectiva en las discusiones. En la carrera académica incorporamos mayor tiempo para ascender en la carrera a mujeres embarazadas en ese periodo; en la política de equidad e inclusión se incluye la necesidad de combatir la existencia de carreras masculinizadas y feminizadas.
  • Se aprobó la idea de legislar sobre la modificación del estatuto de la Universidad de Chile. Este es un hito histórico pues estos estatutos aun tienen rezagos del estatuto heredado de la dictadura, y hoy podemos pensar en profundizar el proceso de democratización vivido a fines de los años 90. Actualmente se está discutiendo esta reforma donde ya se aprobó la participación tristamental en las elecciones de las autoridades unipersonales (Rector, Decanos, Directores de Instituto). Finalizando la propuesta esta debe ir a un referéndum donde toda la comunidad universitaria debe votar el nuevo estatuto.
  • Actualmente el Senado Universitario, además de la reforma de estatutos está poniendo sus esfuerzos en el reglamento de carrera académica y el reglamento de remuneraciones que junto a las otras temáticas constituyen enormes desafíos para los que nos sucederán en la tarea de seguir construyendo universidad para Chile.
Finalmente, estamos orgullosas de los avances en este periodo y convencidas de que el Senado es un espacio clave para cambiar la Universidad. Pero también convencidas de que falta mucho que avanzar y que este periodo que comienza tiene las mejores condiciones para hacerlo. La invitación está abierta, a que sigamos construyendo una universidad más democrática al servicio del pueblo.


Irací Hassler
Scarlett Mac-Ginty
Senadoras Universitarias 2012-2014

viernes, 14 de febrero de 2014

Sin medias tintas, a defender la revolución bolivariana

Frente a los últimos acontecimientos ocurridos en Venezuela, y teniendo como primera consideración la hermandad de nuestros pueblos, me parece importante que los distintos actores políticos y sociales que tienen la responsabilidad en el acontecer nacional se pronuncien ante los graves hechos que están ocurriendo en la hermana república. En este sentido es que, como secretaria general de la Fech y militante comunista, me gustaría entregar mi opinión.

Antes que todo, rechazo el intento desestabilizador y golpista, que busca tomar por asalto la democracia venezlana y su proceso revolucionario, de vanguardia en el continente. Lo que está hoy en juego en Venezuela es la puesta en jaque del gobierno y a través de ello de todo el proceso revolucionario, arrastrando también a su democracia.

Esto exige de nuestra parte posiciones políticas claras, quienes nos reconocemos de izquierda debemos ser tajantes: aquí no hay lugar para medias tintas, silencios, omisiones, ni falsas neutralidades. Buscar puntos intermedios o cavilar cuando es la derecha la que avanza sólo beneficia a la reacción que aún añora el reestablecimiento del viejo orden oligárquico.

El proceso bolivariano, como todo proceso social en construcción, puede y debe enriquecerse con la experiencia, con sus aciertos y errores. La izquierda chilena no puede menos que enviarle sus fuerzas al gobierno y al pueblo venezolano, para que puedan superar de manera exitosa esta dura prueba que nuevamente la reacción le pone en el camino.

Irací Hassler
Senadora Universitaria
Secretaria General Fech.

viernes, 7 de febrero de 2014

Carta de Karol Cariola leída en el Senado Universitario 19 diciembre 2013



Carta de Karol Cariola leída en el Senado Universitario 19 diciembre 2013 a propósito de discusión sobre el Hospital Clínico JJ Aguirre.


19 de diciembre de 2013

Carta a la Comunidad de la Universidad de Chile, a su Rector, Senado Universitario, Fech, Fenafuch, Acauch y Coordinadora por la Recuperación del Jota:

Junto con saludar a toda la comunidad universitaria, les escribo como diputada electa por el distrito 19 y además matrona de profesión, para manifestar mi preocupación por el presente y futuro del Hospital Clínico de la Universidad de Chile.

Estoy convencida de que para lograr mejorar las condiciones de vida de la gente y avanzar hacia la equidad, debemos fortalecer prioritariamente la salud pública, y particularmente la red de la zona norte y por tanto también al Jota, que históricamente ha jugado un rol protagónico en la provisión de un servicio de salud altamente avanzado, en la investigación biomédica de frontera, y principalmente en la formación de miles de profesionales de la salud altamente calificados.

Confío también en que estamos iniciando un nuevo ciclo político en Chile, en el cual la salud, junto a la educación, deben ser temas fundamentales de la agenda pública, tal como lo demanda la mayoría del país. De esta forma, el Estado debe asumir un rol activo y protagónico en la provisión de estos derechos sociales que aseguren calidad y acceso para todos.

En este sentido, se deben buscar soluciones de mediano y largo plazo para el problema de financiamiento del Hospital Clínico, que aseguren, junto con su sostenibilidad económica, el cumplimiento del rol público para el cual fuera creado, atendiendo las necesidades de salud de la población de la zona norte y la formación de profesionales comprometidos con la excelencia y el servicio social.

No me parece coherente con esos objetivos, que la principal universidad del Estado arriesgue la propiedad del Hospital frente a la banca privada, menos en un momento de la coyuntura nacional, en los que esas señales pueden ser percibidas como contrarias a los procesos políticos de cambio del país. Las soluciones para problemas del sector público, dentro de las lógicas del mercado y el autofinanciamiento ya han mostrado ser contraproducentes para la viabilidad del Jota, y lo han llevado a reducir significativamente su quehacer, siendo la principal causa del endeudamiento que hoy aqueja al Hospital y a toda la Universidad.

Por lo anterior, quiero manifestarles a todos los miembros de la comunidad universitaria  y sus organizaciones, mi disposición al trabajo conjunto para fortalecer el rol de la Universidad de Chile en las políticas educativas y de salud del país, y a que podamos realizar un proyecto a mediano y largo plazo que implique la búsqueda de un incremento significativo del financiamiento estatal para la Chile y su hospital, que permita la reincorporación del Jota a la red pública y el fortalecimiento de su rol dentro de la sociedad, aliviando a los habitantes de la zona norte de sus problemas de salud, y se transforme en un espacio donde efectivamente se fomente la investigación biomédica, los estudiantes puedan recibir la mejor formación, y se ofrezca a los más necesitados el servicio de calidad que se merecen.

Los saluda atentamente,

Karol Cariola
Diputada electa Recoleta-Independencia